Arriba está el trigrama Chen (Trueno), abajo está el trigrama Ken (Montaña). La imagen metafórica de este hexagrama es la cima de una montaña que puede parecer muy cerca de la fuente de un trueno, pero la inmovilidad terrenal de la cima no le permite acercarse más. A medida que el eco del trueno se desvanece, parece recordar a la montaña que debe ocuparse de asuntos terrenales, no elevados.
La forma de este hexagrama también se asemeja a un pájaro agitando sus alas para volar, pero Xiao Guo le dice a este pájaro que el momento del trueno no es el momento para vuelos ambiciosos. Es más prudente volar desde la montaña hasta un nido seguro. De manera similar, este hexagrama nos dice que ahora es el momento para llevar a cabo deberes modestos, no para implementar planes grandiosos.
En esta situación, nos resultará difícil hacer algo significativo, y a pesar de nuestro arduo trabajo, podemos perder algunas oportunidades. Es mejor mantener una postura reservada y enfocarse en asuntos pequeños hasta que quede claro qué hacer a continuación.
Sin embargo, no debemos abandonar por completo nuestras ambiciones y metas. La auto-negación a través de una humildad excesiva puede convertirse en mezquindad y falta de respeto hacia los demás. Debemos recordar el equilibrio y no caer en extremos. El hexagrama también nos recuerda que a menudo la simple precaución puede evitar grandes desastres.